La creación de las Google Glass fue una de las primeras piezas de la tecnología vestible para romper varias barreras en la cotidianidad de la persona. Cuando se anunció el lanzamiento de este dispositivo, no fue sólo el mundo de la tecnología y el de los informáticos que se asombraron con esto, también el público en general. Aunque el anuncio y el preliminar uso de esta tecnología generó asombro, también se vieron reacciones negativas.

Las agresiones físicas y verbales, una selfie en la ducha e incluso una sesión de interrogatorio cortesía del Departamento de Seguridad Nacional (NSA por sus siglas en ingles), los usuarios de las Google Glass están entrando en todo tipo de situaciones de peligro, raras y/ó extrañas debido a este dispositivo. Echa un vistazo a algunos de los casos más bizarros que se han visto en la web, y si no los conocías, probablemente te hagan dudar de tener esta maravilla tecnológica.

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1. Atacado En Un Bar

Probablemente uno de los incidentes más infames relacionados con Google Glass fue aquella en la que Sarah Slocum, se le pidió que se quitara sus Google Glass mientras estaba en un bar de San Francisco. Los otros clientes que allí habían, no deseaban quedar registrados en el dispositivo portátil. Finalmente, uno de los propietarios tomaron el asunto en sus propias manos y taparon la vision del dispositivo. Aunque se las arregló para entrar nuevamente, el bolso y teléfono celular fueron robados durante el incidente.

2. Asaltado 

El escritor Kyle Russell se dirigía a su casa después de estar en una protesta en contra de un empleado de Google, un hombre se acercó a él y lo agarró del dispositivo. En la persecución, el ladrón rompió las gafas contra el suelo, destruyéndolas. El incidente puede o no estar relacionado con la protesta, pero después de que Russell trino acerca del suceso, una lluvia de respuestas anti Google Glass y anti Google entró, diciendo que se lo merecía.

Just had Glass torn off my face and smashed on the ground in the Mission

— Kyle Russell (@kylebrussell) abril 12, 2014

3. Recibir Un Multa 

Una mujer de California con el nombre de Cecilia Abadie recibió una multa por el usar las Google Glass mientras conducía. Fue acusada por llevar el dispositivo, ya que se consideró que era una forma de distracción al momento de conducir. La buena noticia es que la multa fue finalmente desestimada, ya que no había suficiente evidencia para probar si se estaba utilizando el dispositivo o incluso encendido cuando ella cometió «el delito».

4. Malas Calificaciones Por Parte De Los Usuarios

Katy Kasmai, se le pidió que se quitara el dispositivo, mientras estaba en un restaurante de Nueva York, ya que algunos de los otros clientes se sentían incómodos ante la idea de ser potencialmente grabados. Ella se negó y se fue, publicando sobre el incidente en su página de Google+. El mensaje recibió mucha atención por parte de otros usuarios de las Google Glass, algunos de los cuales arremetieron contra el establecimiento con malas críticas relacionadas a ese incidente. Sin embargo, Kasmai sintió que le debía una disculpa al restaurante por cómo sucedieron las cosas, y se ofreció a enseñarle el restaurante cómo funcionan las Google Glass.

5. Interrogacion Por Parte De Agentes Del Estado

Imagina la siguiente situación: Vas al cine para disfrutar de una buena película, claro, acompañado de las Google Glass, cuando de repente aparecen agentes del estado y te escoltan fuera del cine. Luego de que te pierdes de la película, los agentes te retienen durante 3 horas en un interrogatorio. Pues bien, esto fue lo que le paso a un usuario en USA, del cual sospechaban que estaba grabando en secreto la película para fines de piratería. El usuario de las Glass cooperó durante el interrogatorio, y explicó que el dispositivo estaba apagado. El hombre fue puesto en libertad, y como compensación por los problemas, se le dieron4 entradas gratuitas.

6. «No son bienvenidos aquí»

Julian Oliver creó un programa llamado Glasshole.sh. El cual permite que un punto de acceso WiFi, detecte cualquier dispositivo Glass que desee conectarse a la red. Por supuesto, esto no va a evitar que se utilice su propia conexión inalámbrica, pero por lo menos, hace que sea un poco poco más difícil para los usuarios de Google Glass recibir conexión externa, el script muestra el siguiente mensaje:  «No son bienvenidos aquí».

7. Usuarios Baneados Donde Lleguen

Google recientemente abrió su programa Explorer para el público en general. El proyecto todavía se considera en su fase de prueba y el programa no se consideraba una liberación del producto para los consumidores. Sin embargo, eso no impidió que algunos propietarios de negocios prohibieran preventivamente el uso de las Google Glass en sus instalaciones, por temor a que el dispositivo se podría utilizar para grabar vídeo discretamente. La prohibición está en vigor en pequeños restaurantes e incluso en grandes cadenas de cine, todo ello en nombre de la protección de la privacidad y la prevención de la piratería de películas.

8. Golpeado Por Usar Tecnología Vestible

Tal vez el problema no es de las Google Glass, quizás el problema radique en la transición que debe de tener esta nueva tecnología. Steve Mann, inventor de EyeTap, un precursor de Google Glass, es ampliamente considerado como el padre de la informática portátil. Mientras que en un McDonalds ubicado en París, fue agredido por un hombre que trató de dar un tirón al EyeTap que llevaba. El problema era que el dispositivo se une al cráneo. A pesar de los esfuerzos por explicar cómo funcionaba el dispositivo, Mann fue sacado por la fuerza del restaurante y su EyeTap dañado durante el forcejeo.

Finalmente

Estas son sólo algunas de las situaciones extrañas ó bizarras que los usuarios de Glass han encontrado de momento, por causas ajenas a su cuenta, además de usar el dispositivo. El riesgo de ser asaltado por tener el dispositivo en uso es real y como se pudo ver pasó. Con esto podemos ver que lo usuarios de las Google Glass no pueden pasar inadvertidos en la sociedad. Incluso, en el proyecto Explorers de Google, se mencionan unos consejos antes de salir a explorar el mundo con las Google Glass.